No tenia nada, era como un vació, nada, todo era blanco sin nada, muy frustrante, el día estaba nublado, oscuro, es horrible tener la sensación de nada... Es cuando miro la ventana, veo como caen las hojas y el viento corre susurrándome su nombre, tu nombre, salgo al patio para escuchar el susurro con más claridad, miro al cielo y las gotas caen, son como lluvia los recuerdos que me inspiran a escribir, como gotas de lluvia son las palabras que te definen, y el viento sigue hablándome, y obligándome a escribir de ti.
Y esto mis queridos niños es como transformar un texto cualquiera en uno romántico, recuerden que la inspiración llega como la lluvia en la sequía, y que aparece cuando la necesitas...
Aprendan a buscarla...
Se despide nuevamente:
Cam Azúcar Quinteros
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